Etiquetas

viernes, 23 de octubre de 2009

Cafe Subversivo y Solidario

Café subversivo y solidario
Un breve recorrido histórico clarificador.

Hola mis estimados, el propósito del presente articulo es breve y concisamente exponer ciertos antecedentes históricos y mitológicos que dan cuenta de porque el café es la bebida subversiva por derecho propio y hasta donde se hunden las raíces del café solidario ¿usted era uno de los ingenuos que pensaba que todo partió en Psicología de Sausalito por estudiantes enojados por el alto precio del café y la poca disposición de espacios propios en la universidad?, no, el café tiene una larga historia subversiva y hasta revolucionaria que lo acompaña desde sus primeros días.

Todo comenzó cuando un pastor llamado Kaldi (aunque bien podría haber sido Abdul alhazreid, el poeta árabe loco) en Abisinia, en la lejana Aetiopia, notó que sus cabras enloquecieron inexplicablemente un día dejando de obedecer a sus ordenes y saltando alocadamente mientras se oscurecía el cielo y sonaba un trueno a lo lejos, el humilde esperpento humano se dedico de perseguir toda la noche a las infatigables cabras enloquecidas hasta que volvieron a recobrar la razón y pudo volver muy confundido a su casa.

Al día siguiente el pastor llevó a sus cabras a pastar en el mismo lugar y sucedió que nuevamente las cabras enloquecieron, pero esta vez notó que lo que producía la locura no era otra cosa que un pequeño fruto silvestre que surgía de un árbol en el monte. Kaldi tentado por la curiosidad probó del fruto y sintió su amargo sabor, tan desagradable como extraño, era un sabor que cerraba la garganta como una noticia devastadora pero que al mismo tiempo daba a su cuerpo una gran energía que aliviaba su cansancio y espantaba el sueño.

Al notar esto el pastor se dirigió corriendo al Abad del monasterio copto en donde el cura escucho extrañado el relato, este al notar el descubrimiento del pastor decidió hervir las ramas y los frutos que Kaldi le había traído para hacer un estracto de infusión, pero al probar el brebaje le pareció tan amargo y detestable que escupiendo la bebida, en un claro acto de censura, lanzó la olla a las brazas de fuego en donde confundiendose con las luciferinas llamas del caldero desprendieron las semillas un particular aroma tan seductor y sabroso que pronto todos los sacerdotes del templo se acercaron a la cocina a ver que era lo que lo producía.

Así fue que el abad probó por segunda vez la infusión tostando antes el café y este particular brebaje nació, pero no era sino el principio de una larga historia.

El café se extendió así por las tierras de oriente en donde los adoradores de Ala y los seguidores del profeta Muhamed, Ala este con él, vivían y prosperaban, allí entre los turcos otomanos que tenían un imperio que se extendía desde Europa oriental al norte de África y de Egipto a Mesopotamia, sucedió que se fundó la primera cafetería en la ciudad de Estambul, antes conocida como Constantinopla, llamada Kiva Han.

Las cafeterías se extendieron por todo el imperio de oriente y pronto se levantaron las primeras suspicacias contra la bebida de parte de los imanes ortodoxos y conservadores, principalmente del Emir de Egipto Khair Bey, siervo del Sultan Turco, quien no veía con buenos ojos el café puesto que un día luego de un peregrinaje a la meca se había detenido a observar detenidamente a los hombres que se reunían a beber café, en ese momento el principe notó que en los salones te café se reunían los disidentes, intelectuales, artistas y licenciosos, que se propagaban noticías (boletines), se le llamaba tirano, se escuchaba musica e incluso en más de algún salon de cafe se veía mujeres danzando mientras otros jugaban ajedrez, era como Sodoma, Gomorra y Sausalito, razón por la cual el Emir reuniendo a los principales juristas y doctores de la ley islamica buscó la forma de prohibir el café (por no estar al día con las normas bacteriologicas del Corán seguramente), así fue la primera censura del Café, se cerraron las cafeterías y se prohibía su venta y producción. Pero Khair Bey no contaba con que como siempre el hombre que bebe café estará dispuesto a defenderlo y fue tanto así que se alzaron las insurrecciones por todo su emirato hasta que finalmente el Emir se vió obligado a abrir las cafeterias bajo la promesa de jamás volver a prohibirlas. Pronto en el mundo islamico el café se hizo tan común que una mujer podía pedir el divorcio si su marido no le proporcionaba una dosis diaría del mismo.

El Café así tuvo su primera victoria y pronto mercaderes venecianos llevaron la bebida a occidente donde pronto se habríeron las primeras cafeterías en las repúblicas y principados de la italia renacentista. No paso mucho tiempo para que un grupo de estudiosos de la biblia llegaran a la auditoria del Papa Clemente VIII para que prohibiese la bebida llamándolo "una amarga invención de Satanas", debido a que decían buscaba sustituir al vino, la sangre de Cristo (lo cual esta probado en Sausalito es una cruel y vil mentira, diganselo a los cuentacuentos), mas en esta ocasión el Papa quien se vió de primera instancia a ascentir decidió antes tentarse en probar un poquito de la bebida (seguramente podríamos llamarle antipapa honorifico) y sucedió que el Café le encantó al sumo pontifice quien profirió que dejar aquel placer solamente a los infieles sería una verdadera lastima bautizando así la bebida en un intento por rectificar su agitado legado (si señores, el café además esta santificado y bautizado).


Así el café salvo de ser quemado por la inquisición junto a los libros que leían quienes se reunían a beberlo, pero no corrió la misma surte entre los puritanos protestantes que consideraban sus efectos tan nocivos como los del tabaco (¿que terror no?), entre otras cosas por la creencia de que podía provocar esterilidad en las mujeres (si fuera por eso...), así fue especialmente en Alemania y el norte de Europa en donde se resistió la medida hasta entrado el siglo XIX, incluso en Rusia la pena por el consumo de Café llego hasta la tortura y mutilación, cuando la policía zarista encontraba a alguien con algún tipo de crisis nerviosa no tardaban en atribuirselo claramente al Café (habría que esperar a que se alzasen los bolcheviques para conocer el Café Ruso o el Ruso Negro).

En cambio en Inglaterra desde el siglo XVII el brebaje comenzó a ser muy preciado, abriéndose las primeras cafeterías en Oxford y Londres, allí nacieron las primeras ideas liberales, puesto que eran el centro de reunión de filósofos y letrados, pronto estalló la Revolución Inglesa instaurándose la República Británica de manos de Oliver Cromwell que comenzase la tradición de decapitar a los reyes en Europa, a pesar de la restauración monárquica el café sobrevivió a pesar de que el fiscal del rey Carlos II de Inglaterra pidiese que cerrasen las cafetería debido a los crimines de ofensa contra el mismo rey que se daban en las mismas, las reacciones del pueblo nuevamente fueron tan violentas y decididas que el rey temiendo un nuevo alzamiento debió revocar su edicto de censura.

Fue así que el Café se extendió al otro lado del gran charco abriéndose la primera cafetería en Boston, pero no tardó el desvanecerse el conformismo, fue así que un grupo de asiduos bebedores de café que se reunían en la famosa cafetería Dragon verde se disfrazaron de indígenas y lanzaron al mar los cargamentos de té de la corona británica (nota: el té es para niñitas e ingleses) durante el motín de Boston que prendió la mecha a la revolución americana que terminase por la instauración de la república.

En Francia no tardaron las cafeterías en acoger las charlas y debates de Jacobinos y hacer de sobremesa a los sans cuttons, era cosa de tiempo para que la insurrección estallase por todo el país y se bailase al son de la guillotine y del oscuro grano, así los revoltosos y agitadores, así como los artistas, magos y filósofos comenzaron a prosperar en Europa al igual que las cafeterías y la bohemia, los cafés en Francia se hicieron centros importantisimos para la difusión de la poseía, la música y del cancán.

Pero no sólo revolución y guillotine traía el café, en Europa los bebedores de café impulsaron las grandes corrientes artísticas como el romanticismo, modernismo, surrealismo, etc... surgido del seno liberal de quienes se reunían en las cafeterías bohemias a discutir de política y arte.

Fue así también en Chile, este alejado rincón del mundo, en donde los revolucionarios independentistas fundaron numerosas cafeterías ya libres de los estatutos comerciales que les imponía la Corona Española, incluso a pesar del intento de funa que hicieron los bebedores de mate de la logia lautarina que se habían formado en la vieja escuela londinense de bebedores de te. Los cafés bohemios en Chile prosperaron y pronto el movimiento intelectual y artístico chileno creció grandemente.

Así llegamos en nuestra resumida historia del café hasta la llegada a Chile de Ruben Darío quien llegaba a las tierras chilenas a hacer poseía en las cafeterías de la bohemia porteña. En estos Salones literarios en los que se consumía café toda la noche fue en donde se hizó amigo de Pedro Balmaceda, hijo del presidente Balmaceda, Pedro sin embargo era un joven poeta talentoso, aunque lamentablemente deformado por un accidente que tuvo cuando era niño, como Darío describiera, Pedro era la cabeza de Apolo encerrada en un cuerpo deforme. Pero el hecho era que así desde las cafeterías chilenas surgirían nuevos aires de innovación artística que serían temporalmente detenidos por culpa nuevamente de los conservadores quienes sumieron al país en la guerra civil como ya antes también lo hubieran hecho hace unos cuantos años, Pedro, el hijo de Balmaceda, murió un poco antes de que aquello pasara por enfermedad y el Presidente liberal hundido en la derrota de la guerra civil y la depresión se vió enfrentado a su revolver en la embajada argentina jugando solo a la ruleta rusa como ya todos deberían saber.

Pero la enmarañada mata del café volvió a crecer y pronto los Salones literarios volverían a surgir en nuestro país, estos salones literarios o cafeterías chilenas harían de sobremesa a Vicente Huidobro, Omar Caceres, Pablo de Rocka, Pablo Neruda y muchos otros miembros de la epoca de oro de la poseía chilena, no fue freno que un grupo de conservadores armaran tanto albarraque allá por el 73 con un golpe de estado, secuestros, torturas y todo, los bohemios revoltosos bebedores de café prosperaron todavía incluso durante el toque de queda despiertos toda la noche en los salones nocturnos gracias a la ayuda del distinguido Café, esperando así la mañana para poder emerger nuevamente.

Fue así que el Café llegó a Sausalito con toda su carga legendaria e histórica, cuando un grupo de estudiantes, pero antes sujetos, decidieron crear un café para psicología, un café para Sausalito, que fuera solidario y libre a un precio justo y autosustentado, sin fines de lucro, pero las fuerzas coercitivas y conservadores de la universidad del mismísimo Papa obligaron a cerrar la cafetería tal cual el Emir de Egipto lo hiciese hace tanto tiempo atrás, nuestra cafetería, nuestro centro intelectual y artistico, así nuevamente como le sucediera a Khair Bey los estudiantes se alzarón en protesta truncando la mano de hierro de la universidad hasta que pudiésemos volver a beber café en paz en los pacillos de la universidad, mientras se repartían panfletos revolucionarios e ideas artísticas.

Fue una hermosa temporada por allá en el 2006, año de la subversión estudiantil que conoció de Café, titeres, tomas y amistad, desde entonces ha pasado tiempo de aquello y el café esta allí, nuevamente esperando su momento, porque en el fondo todos queremos café y no estamos dispuestos a que se abuse de nosotros con precios o medidas injustas, por ahora me iré a beber otro café mientras contemplo como la oscura semilla se abré paso por las eras con su tinte subversivo, aquel que enloqueció a las cabras, aquel que asuzó a los egipcios, que sedujo al Papa, que alimentó a los revolucionarios en america y europa, que se posó en la mesa de las vanguardías literarias y que hoy en día se posa en nuestras firmes manos.

¿Que viva la Republica, la Democracia, el Socialismo ni que nada? ¡Que Viva el Café Solidario!

No hay comentarios: