Corría el mes de noviembre del
año 2012 y cual flor en primavera vio una tarde el sol La Salita, o quizás fue
antes. Algunos recuerdan haberla ocupado el 2011, para imprimir, cuando la
impresora solidaria tenía tinta y era usada más o menos democráticamente pero aún
era impensado siquiera fumarse un pucho en este lugar. Es como cuando el Omar “manos
de sopapo” Saldivia[1] prohibía
hacer caca en el baño del Olimpo estando en Toma. ¿Por el Olor? ¿Por respeto a los
profes? ¿Por complejo anal?
Lo cierto es que como nunca antes,
ese año por acción o coacción la salita, hasta entonces denominada “la salita”,
fue ocupada pa estar, pa estudiar y pastear. Algunos más osados quizá guíados
por un sórdido instinto animal hicieron de las inmaculadas paredes de este
templo un mudo cómplice de sus deseos y travesuras. Sin embargo solo porque se
podía, porque nadie tenía llave y nadie iba a entrar. La seguridad del espacio
público/privado quedaba en entredicho cuando solo algunos teníamos
llave de la salita.
Poco a poco sin embargo las
desgeneraciones posteriores al 2011, trajeron el espíritu de la democratización
del espacio universitario. Y de todos los espacios. Pasteando por ende la
salita, la piscina, el cardamomo y el Olimpo en tiempos de Toma. Ya no solo la
cantidad, calidad y dureza de las drogas consumidas por los estudiantes
aumentaba, ahora había techo, parlantes y paredes donde descargar los
inquietantes pensamientos que quitan el sueño en la rabia y soledad oceánica de
la adolescencia liberal pequeñoburguesa. Frases como: “en vola con sexo bajo de
peso”, “cocho prestate la hermana :O”, “froy te amo” y “ La Vero jala coca”; vivirán
en la memoria de una generación que ha escupido a sus progenitores psicosaurios
y recuperado de apoco los testículos empeñados a Bilbao, a pesar de no haber
tenido clases con él.
Hoy día la salita representa el advenimiento de las dinámicas sociales de la nueva era, post psicosaurio. Junto con las nuevas generaciones, alejadas del conservadurismo y no tan cercanas al bacile gay (exceptuando al kamilo) se encuentran en este espacio desnormativizado una multiplicidad de identidades/subjetividades que en lo simbólico parecieran venir a romper con todo, ayia.
Es por eso que nos tomamos este
blog, antiguamente conocido como “El Blog del café solidario” y lo rebautizamos
en honor a la salita, porque los tiempos han cambiado, como también han
cambiado nuestros espacios, Místico se tituló , Zelaya es profe, Sausacuentos
ahora cobra y Chico Seba… bueno, siempre será Chico Seba.
[1] Sopaposaurus Rex: Psicosaurio sin titular; antiguo
presidente del centro de alumnos y ex líder de Sausacuentos. Actualmente
disfruta del mundo mágico a otro nivel de shuperlocura.
3 comentarios:
no tan cercanas al bacile gay (exceptuando al kamilo) se encuentran en este espacio desnormativizado... mmm... contradictorio xD
bacilar gay es una opción
tus cachetes son contradictorios
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